DE COURCELLES, DOMINIQUE
En la España de los siglos XV a XVII, con los grandes viajes y laexploración de mundos desconocidos, aparece una nueva conciencia de la tierra y del tiempo expresada mediante nuevas representacionesliterarias y artísticas. El mundo, hasta entonces cerrado, setransforma en un universo infinito. El arte de construir jardines opalacios, de narrar un viaje experimental o una búsqueda poética ymística, de pintar paisajes y glorias celestes da fe de una renovación de la mirada ;filosófica, alquímica, teológica, política;. Cadaobjeto, a su escala ;palacio, jardín, relato, cuadro;, sostiene unamanera de ser de quien lo recorre con su cuerpo o con sus ojos. Elarte de los príncipes y sus arquitectos adquiere una intenciónmística: habitar maravillosamente el mundo, en armonía con la tierra,el agua, el aire y el fuego luminoso, es habitarlo tal cual es; esdecir, experimentar en él la presencia divina, ver el mundo en Dios.Habitar maravillosamente el mundo se inscribe en una perspectivageométrica y mística del infinito y de la eternidad.De este modo se elabora un arte hispánico de habitar maravillosamenteel mundo que, de