MARTÍN RAMÍREZ, ÓSCAR
Un guionista en paro, una máquina de escribir, un pie que desaparece, una cena con amigos que se desmorona. Así empieza la caída (o la revelación) de Hugo Neblín. Borrando a Hugo es una obra sobre el colapso. Del cuerpo, de la identidad, del mundo. Pero también es una comedia. Y una historia de amor. Y un último intento por escribir algo que importe antes de volverse invisible del todo.
El volumen incluye también La sala de espera, un texto tan absurdo como lúcido sobre lo que ocurre después de morir. Dos obras que te sientan en primera fila para ver cómo se derrumba todo
con estilo.
Óscar Martín Ramírez firma dos comedias existenciales que huelen a Beckett, suenan a rabiosa actualidad y duelen justo donde deben. Si al leerlas (o verlas representadas) no te reconoces, examínate bien. Quizás estás desapareciendo.